Como se debe rezar

Cinco son las premisas: con FE, con HUMILDAD, con CONFIANZA, con PERSEVERANCIA, y lo más difícil, con TRANQUILIDAD.

Un pasaje bíblico que nos abre a luz es el de Naaman Siro, desdeñaba el simple baño en el Jordán propuesto por Eliseo para sanar. Más de uno se comporta como Naamdscn4262an desdeñando el rosario, algunos son grandes teólogos. Por eso hay que humillarse, tomar el rosario con fe, con confianza y perseverar.

En la encíclica “Marialis Cultus” nos dice “que el rosario sin la contemplación es un cuerpo sin alma  y que por lo tanto su rezo exige un ritmo tranquilo y reflexivo que favorezca en quien lo ora la meditación”. Muchas veces se corre el riesgo de convertirse en mecánica repetición, pierde su alma que es la contemplación de los misterios.

¡Fijaos! Lo que llama la atención a primera vista en un rosario son las cuentas, pero resulta que sin un hilo que las hilvane no hay rosario, sino un montón informe de cuentas. Lo que da sentido al rosario es esa historia de salvación que va hilvanada con los distintos misterios de Cristo que vamos recorriendo con María. Para esto es necesario pasar prestando atención a lo que miramos, nuestro caminar no ha de ser errante, sino envolvente: contemplativo. Caminar está ante todo asociado al movimiento, aunque no hay movimiento sin estacionamiento, como ocurre con los peregrinos que en los albergues paran a descansar. Con el rosario pasa algo parecido… es completamente activo, dinámico, pero al mismo tiempo requiere detenimiento, su estacionamiento en los images-47misterios para que se genere ese movimiento interior, ese gustar lo que se ve.

San Luis Mª Grinon de Monfort nos dice “que aquellos que se precipitan son los que están deseando acabar antes de haber empezado, y asegura que esto ocurre cuando se reza considerándolo una carga, como un deber de conciencia o cuando se les ha impuesto como penitencia”. Lo rezan por obligación no por devoción y así no se honra bien ni a María, ni a Dios. Y nos da un consejo para evitar esta actitud: encomendar una intención al rosario pidiendo alguna gracia, algo que necesitemos o sea necesario. No rezar por rezar sin más. Los pastorcitos así lo hacían y eso les ayudaba a darle mayor sentido y devoción a sus rezos ofreciéndoselos a Dios.

A los que dicen que el rosario es una oración anticuada, monótona y repetitiva, Lucía les contesta “que no hay cosa que viva que no sea por la repetición continuada de los mismos actos, nuestra misma respiración, el corazón, los astros, la noche y el día, las estaciones del año, etc… A nadie se le ocurrió decir que era monótono y por lo tanto prescindible, precisamos de esa repetición precisamente para vivir”. Y dice aún más… “lo que les falta a los que la hayan aburrida y monótona es el Amor, que es lo que la llena de valor”. A los que así les resulte el rosario que examinen el amor que ponen. Y termina diciendo: “los que lo rezan diariamente son como los Hijos que todos los días disponen de algunos momentos para ir junto a su padre, para hacerle compañía, manifestarle su agradecimiento, prestarle sus servicios, recibir sus consejos y bendición”.